CAYO HUESO, Florida, EE.UU. (AP) — La nadadora de resistencia Diana Nyad canceló el martes su cuarto intento en casi 35 años de nadar de Cuba a Florida, luego de cuatro días de tormentas, picaduras de medusas, hipotermia, labios hinchados y la amenaza de los tiburones.
El equipo de apoyo a Nyad informó que la sacó del agua a las 00:55 horas, mientras había una tormenta y las embarcaciones de apoyo a su alrededor eran sacudidos por los vientos y las olas. Su equipo había tuiteado anteriormente que ella fue retirada del mar a las 7:42 horas, sin precisar explicaciones por el cambio.
En su blog, la integrante del equipo Candace Hogan escribió que Nyad negó airadamente con la cabeza después de haber sido sacada del agua y planeaba terminar el recorrido a nado una vez que aminorara la tormenta.
«¿Cuándo puedo volver?», dijo la nadadora, citada por Hogan. «Quiero que sea totalmente transparente que estoy fuera del agua, pero todavía tengo mucho en mí y quiero seguir adelante».
Pero luego «se dio cuenta de que los obstáculos en contra de este nado eran demasiado grandes y estuvo de acuerdo antes del amanecer en volver a Cayo Hueso por barco», agregó Hogan.
La atleta, nacida en la ciudad de Nueva York, era llevada en un barco hacia los Cayos de Florida, donde se esperaba su llegada horas más tarde.
Nyad, quien cumplirá 63 años el miércoles, estaba haciendo su tercer intento en un año para ser la primera persona en cruzar nadando el estrecho de Florida sin una jaula contra tiburones. En 1978 lo intentó con una jaula, pero no lo logró.
Nyad había dicho que este sería su último intento, pero hizo la misma promesa a sus amigos y colaboradores en septiembre pasado, cuando bajó de su barco en un muelle de Cayo Hueso, con extremidades y labios rojos e hinchados por las picaduras de medusas.
«No quiero pasar el resto de mi vida intentando y fallando, fracasando e intentando esto», dijo Nyad en Cayo Hueso la semana pasada. «No me gustaría estar aquí de nuevo con ustedes el año próximo y decir: ‘Bueno, no pude hacerlo de nuevo»’.
Otra integrante del equipo de Nyad, Vanessa Linsley, dijo a The Associated Press que la nadadora estaba maltrecha tras pasar una mala noche en la travesía de 165,75 kilómetros (103 millas).
«En lugar de que la maltratara una sola cosa la maltrataron tres», dijo Linsley. «Le pegó el mal tiempo, le picaron las medusas y le afectó la presencia de tiburones, todo al mismo tiempo».
Sólo el lunes por la noche solo, las medusas le picaron a Nyad nueve veces, informó su equipo en su blog.
Fue retirada del mar después de una segunda noche consecutiva de tormentas. El lunes por la noche, el equipo de la nadadora improvisó maneras para prevenir que sufriera hipotermia y para evitar que tuviera más hinchazón en los labios y la lengua.
A pesar de que nadaba en aguas de 30 grados centígrados (85 Fahrenheit), esa temperatura es menor que la del cuerpo, por lo que con el paso de mucho tiempo acaba por afectar. Su equipo dijo que había estado temblando.
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Matt Sedensky está en Twitter en: www.twitter.com/sedensky
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