La Asamblea Nacional de Venezuela —de mayoría opositora— declaró el martes la ilegalidad de la criptomoneda que lanzó el gobierno y alegó que vulnera la Constitución. La decisión desata una nueva confrontación entre los poderes en medio de la profundización de la crisis económica.
El Congreso aprobó sin la presencia de diputados oficialistas un acuerdo en el que se declaró «nulo» el decreto con el que el presidente Nicolás Maduro creó la criptomoneda «petro» argumentando que es «violatorio de la constitución y las leyes».
Los congresistas opositores señalaron al gobierno de recurrir a la emisión de la criptomoneda para «evitar el control sobre las operaciones de deuda pública» y obtener financiamiento «de forma ilegal», así como de evadir las presiones que enfrenta el país luego del retraso en los pagos de los intereses de algunos bonos de deuda pública externa en los que ha incurrido en los últimos meses.
Asimismo, los diputados objetaron que el gobierno diera como respaldo del «petro» las reservas petroleras de un campo de la faja petrolífera del Orinoco e indicaron que esa decisión viola un artículo de la constitución que declara «inalienables e imprescriptibles» los yacimientos mineros y de hidrocarburos de Venezuela.
«La criptomoneda es ilegal y quien invierta allí no tiene garantías legales», dijo el diputado opositor Jorge Millán al objetar el lanzamiento de la moneda digital del gobierno.
Aunque es muy probable que el gobierno logre frenar la medida del Congreso con el apoyo del Tribunal Supremo de Justicia y la Asamblea Constituyente —que controla el oficialismo—, la decisión de los legisladores podría generar ruido en los mercados internacionales, donde las autoridades tenían previsto colocar el petro.
Maduro anunció el mes pasado que crearía el petro para enfrentar lo que describió como un «bloqueo» financiero que mantiene el gobierno de Donald Trump al país suramericano. El mandatario dijo que el petro estaría respaldado en el campo número 1 del Bloque Ayacucho de la Faja del Orinoco, que aseguró tiene reservas probadas de más 5.000 millones de barriles de petróleo.
El lanzamiento de la criptomoneda se da en un contexto de una profunda crisis que enfrenta Venezuela con una galopante inflación que cerró el año pasado en 2.616% según estimaron legisladores opositores, una severa escasez de alimentos y medicinas, y una recesión económica.
Desde que instaló en 2016, la actual Asamblea Nacional ha mantenido un abierto enfrentamiento con el gobierno y el resto de los poderes públicos. La pugna se intensificó en agosto pasado con la instalación de la oficialista Asamblea Constituyente, que aprobó un decreto en el que asumió las competencias legislativas del Congreso.
Fuente: Associated Press