El Encuentro Nacional Cubano (ENC), que agrupa a 65 organizaciones opositoras de dentro y fuera de la isla, dijo hoy que, al «dejar morir» al disidente Guillermo Fariñas, el Gobierno de Cuba comete un «asesinato premeditado» y pidió a la comunidad internacional que presione para salvar su vida.
En una rueda de prensa en Miami para presentar los resultados de su segunda reunión, celebrada en Puerto Rico el mes pasado, varios integrantes de la recién creada Mesa de Coordinación del ENC subrayaron que toda su atención está puesta en Fariñas, líder del Foro Antitotalitario Unido (FANTU).
Fariñas, residente en Santa Clara (centro de Cuba), cumple una huelga de hambre y sed desde hace 49 días para exigir al Gobierno de Raúl Castro que cese la represión y se abra a un diálogo con la oposición.
«Lo necesitamos vivo para la Cuba del futuro», dijo hoy Guillermo Toledo, coordinador general de enlace del ENC en representación de los cubanos exiliados.
Tanto Toledo, que reside en Puerto Rico, como Ramón Saúl Sánchez y Julio Shiling, también miembros de la Mesa de Coordinación del Encuentro Nacional Cubano, subrayaron que el estado de Fariñas, de 54 años, es «grave» y puede llegar a ser «crítico» en cualquier momento.
Sobre todo si el Gobierno cubano mantiene su «táctica» de no dejar internado a Fariñas en la unidad de cuidados intensivos, sino darle un tratamiento de rehidratación de urgencia y mandarle a su casa a las pocas horas, dijeron los opositores.
Sánchez, del Movimiento Democracia, con sede en Miami, indicó que «el ajetreo de ir y venir del hospital» puede costarle la vida a Fariñas, ganador del Premio Sájarov en el año 2010.
No hay un médico que se encargue del caso de Fariñas y además los traslados no se hacen en ambulancia sino en el automóvil de un vecino que no siempre está disponible, lo que aumenta el riesgo, indicó.
«Fariñas necesita cuidado intensivo en un hospital», subrayó por su parte Toledo, quien indicó que el hecho de hacer que se traslade cada vez que sufre una pérdida de conocimiento equivale a un «asesinato premeditado».
Ante esta situación, Alicia Fariñas, hija del disidente, se propone lanzar un «S.O.S.» internacional por su padre el próximo viernes. Ella lo hará a las 12 del mediodía desde Puerto Rico, donde reside, y a la misma hora se celebrarán actos de solidaridad y apoyo a Fariñas en otros lugares como Miami.
«Hay que salvar la vida de un hombre que se ha echado a cuestas la dignidad de Cuba», aseveró Toledo en medio de los aplausos de los asistentes a la Escuela de Estudios .
Sánchez llamó a evitar que Fariñas sea «asesinado» por el «régimen totalitario» como, según dijo, lo fueron Osvaldo Payá, fundador del Movimiento Cristiano de Liberación, y Laura Pollán, la fundadora de las Damas de Blanca.
Sobre el papel que la comunidad internacional puede jugar para presionar a Castro a responder a las demandas de Fariñas, Toledo indicó que el Gobierno de EE.UU. debería hacer saber al presidente cubano que «las relaciones bilaterales se pueden afectar si dejan morir a Fariñas» y lo «mismo pasa con los países europeos» que están negociando un acuerdo con Cuba.
El gobierno cubano, que niega tener prisioneros políticos, no se ha pronunciado sobre las declaraciones de Fariñas, ignoradas por la prensa local, toda bajo control estatal.
A sus 54 años, Fariñas ha protagonizado cerca de una treintena de huelgas de hambre desde 2005, todas por reclamos políticos a los gobiernos de Fidel y Raúl Castro. La mas reciente fue en 2010, cuando mantuvo 100 días de ayuno.
Al acto asistieron, entre otros, Rosa María Payá, René Gómez Manzano y Henry Constantin, miembros del Encuentro Nacional llegados desde Cuba.
Shiling, de Patria de Martí, una organización de exiliados, subrayó la importancia de haber llegado a crear una «estructura tan plural» como el Encuentro Nacional Cubano para luchar por la libertad y la democracia en Cuba.
Fuente: EFE