El abogado de inmigración y CEO de Benme Legal, Héctor Benítez, aseguró en entrevista con el programa Cada Tarde que existen señales positivas para los cubanos beneficiarios del parole humanitario, tras recientes decisiones judiciales que podrían reactivar procesos suspendidos y aclarar la situación de miles de personas.
“Una jueza en Massachusetts ha ordenado reanudar los procesos de ajuste de estatus de quienes llegaron con parole humanitario y ya cumplieron el año y un día requeridos”, explicó Benítez. Esta medida representa un giro significativo luego de meses de incertidumbre, en los que el gobierno había detenido ciertos trámites migratorios para esta población.
El experto aclaró que hay dos decisiones judiciales distintas que se han entrecruzado y generado confusión: una que autoriza al gobierno a terminar anticipadamente el parole humanitario, y otra que exige la reactivación de los procesos de ajuste para quienes cumplen con los requisitos. “Parecen conectadas, pero son escenarios diferentes. Una habla de revocar el parole, la otra de continuar con las solicitudes de residencia”, precisó.
Benítez también señaló que, pese a contar con la autorización para cancelar de forma anticipada los permisos, el Departamento de Seguridad Nacional ha informado que lo hará de manera individual y notificada. “Si usted no ha recibido una notificación formal a través de su cuenta online, su permiso sigue vigente. No es una cancelación generalizada”, indicó.
Consultado sobre los efectos inmediatos en el empleo de miles de migrantes, Benítez comentó que algunas empresas como Disney y Walmart han colocado en licencia a trabajadores bajo parole, a la espera de una definición. “En muchos casos, han sido enviados a casa con goce de salario. Es una situación transitoria”, aseguró.
En un análisis más político, el abogado coincidió con uno de los conductores del programa en que se han cometido excesos en medio del intento de la administración por poner orden migratorio. “En ese primer tsunami de caos se cometieron atropellos. Afortunadamente, los tribunales están comenzando a poner límites y obligando al gobierno a acatar decisiones”, concluyó Benítez.