A punto de cumplirse el primer aniversario del derrumbe del puente peatonal de Florida International University, la empresa constructora del viaducto Munilla Construction Management se declara insolvente y se apresta a acogerse a la ley de protección para bancarrotas.
Así lo confirmó la firma que llevó a cabo las obras de construcción, que hace apenas unos meses fue multada con 86.658 dólares, junto a las compañías de ingeniería civil y estructural Figg Bridge Engineers Inc., Network Engineering Services Inc., Structural Technologies LLC,
La empresa constructora aseguró que “no se declara en bancarrota para evadir la responsabilidad que pudiera surgir de las investigaciones” y anticipó que “proyecta asumir las reclamaciones como parte del proceso de reestructuración de las deudas”.
De hecho, la compañía constructora ha sido demandada en los tribunales por sobrevivientes y familiares de los fallecidos en el derrumbe.
El puente peatonal se desplomó el 15 de marzo de 2018 a plena luz del día e impacto ocho vehículos, siete de los cuales estaban ocupados, y dejó a un obrero y cinco pasajeros muertos, así como ocho heridos.
Fotos y documentos divulgados por la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB), que investiga el suceso, confirman que a partir del 10 de marzo se formaron grietas en la estructura de concreto de entre 4 a 6 pulgadas, unos 10 a 15 centímetros.
El puente peatonal prefabricado de 53 metros tenía la finalidad de dar seguridad a los estudiantes que debían cruzar la transitada Calle Ocho frente al campus de la Universidad Internacional de Florida ubicado en las inmediaciones de la 107 avenida del suroeste de la ciudad.
La construcción, impulsada por la FIU, empleó el denominado método de “acelerada construcción”, el cual busca reducir las interrupciones del tráfico durante las obras.
Los investigadores del NTSB señalaron con anterioridad que el día de la caída un equipo de trabajadores se hallaba “retensionando” una de las vigas diagonales que conectaba la estructura a los soportes del extremo de cara hacia el norte.
FUENTE: Diario Las Americas