El juicio por espionaje en Rusia del reportero del Wall Street Journal Evan Gershkovich comenzará el 26 de junio y se celebrará a puerta cerrada, según un comunicado el lunes de la corte que instruirá el caso.
Gershkovich, un ciudadano estadounidense, lleva encarcelado desde su detención en marzo de 2023 y enfrenta una pena de 20 años de prisión si es condenado.
El juicio se celebrará en la corte regional de Sverdlovsky en Ekaterimburgo, la cuarta ciudad más grande de Rusia, donde fue detenido. El reportero ha estado detenido desde entonces en la prisión moscovita de Lefortovo, unos 1.400 kilómetros (870 millas) al este.
El juicio estará cerrado al público, como es habitual en los casos de espionaje, señaló la corte.
Gershkovich está acusado de “recopilar información secreta” para la CIA acerca de Uralvagonzavod, una instalación en la región de Sverdlovsk donde se produce y repara equipo militar, dijo en un comunicado la Procuraduría General, revelando por primera vez los detalles de la acusación contra el periodista.
El reportero, su empleador y el gobierno estadounidense han negado las acusaciones, y Washington le ha designado como detenido de forma injusta.
El Servicio Federal de Seguridad le acusó de actuar por orden de Washington para recabar secretos de estado, aunque no ha presentado pruebas para respaldar la acusación.
“Evan no ha hecho nada malo. Nunca debió ser arrestado. El periodismo no es un crimen”, dijo vocero del Departamento de Estado de Estados Unidos, Matthew Miller. “Las acusaciones en su contra son falsas. Y el gobierno ruso sabe que lo son. Debe ser liberado inmediatamente”.
El gobierno de Joe Biden ha buscado negociar su liberación, pero el Ministerio de Exteriores ruso dijo que Moscú sólo consideraría un intercambio de prisioneros después de que se emita un veredicto en su juicio.
Uralvagonzavod, una fábrica estatal de tanques y vagones de tren en la ciudad de Nizhny Tagil, unos 100 km (60 millas) al norte de Ekaterimburgo, ganó fama en 2011-12 como una base de apoyo al presidente de Rusia, Vladímir Putin.
Igor Kholmanskih, un capataz de la planta, apareció en diciembre de 2011 en el programa anual de televisión en el que Putin recibe llamadas de ciudadanos y condenó las protestas masivas que se producían en Moscú en esa época, tachándolas de amenaza contra la “estabilidad» y proponiendo que él y sus colegas viajaran a la capital rusa para ayudar a suprimir el descontento. Al año siguiente, Putin nombró a Kholmanskikh como su enviado en la región.
Putin ha dicho que cree que podría alcanzarse un acuerdo para liberar a Gershkovich y ha insinuado que estaría abierto a intercambiarlo por un ciudadano ruso preso en Alemania, que al parecer es Vladim Krasikov. Éste cumple una condena de cadena perpetua por el asesinato en 2019 de un ciudadano georgiano de ascendencia chechena en Berlín.
Al ser interrogado por The Associated Press acerca de Gershkovich, Putin dijo que Estados Unidos está “dando pasos enérgicos” para garantizar su liberación. En un foro económico en San Petersburgo a principios de junio, dijo a agencias internacionales de noticias que esas liberaciones “no se deciden a través de los medios masivos de comunicación” sino mediante “un enfoque discreto, tranquilo y profesional”.
Fuente: AP