El presidente colombiano Gustavo Petro advirtió el miércoles a Estados Unidos sobre lo que a su juicio es el fracaso de la política antidrogas que por años los gobiernos norteamericanos han financiado y apoyado en el país andino.
Petro, el primer gobernante de izquierda en Colombia, habló de hacer cambios sustanciales en la política antinarcóticos y dio indicaciones al recién posesionado embajador de Colombia en Washington, Luis Gilberto Murillo, respecto a las prioridades en una nueva etapa en las relaciones con Estados Unidos.
Previo a sus declaraciones, Petro se reunió en Bogotá con la comandante del Comando Sur de los Estados Unidos, general Laura Richardson, quien dijo públicamente que su país considera a Colombia como su socio número uno en seguridad de la región.
“Hablábamos ahora en extenso con la general Laura Richardson… del fracaso de la política antidrogas. Yo creo que hay que llamarlo así, sin miedos: la política que se llamó guerra contra las drogas en tiempos de (Richard) Nixon para acá, ha fracasado”, señaló Petro desde el palacio presidencial.
“Es nuestro deber ante los mismos Estados Unidos, pero también ante el mundo, no sólo decirlo, sino proponer alternativas que no sean las de tener un millón de latinoamericanos más muertos”, agregó el mandatario que cumplió su primer mes en el poder.
Colombia continúa siendo el mayor productor de cocaína del mundo. En su territorio había 234.000 hectáreas de cultivo de hoja de coca en el 2021, según el último informe disponible de la Oficina de Política Nacional para el Control de Drogas de la Casa Blanca.
Petro indicó que los “mayores culpables” de la expansión de la droga en Colombia es su propio país que ha mantenido en condiciones de pobreza algunos territorios donde hay más narcotráfico.
Con su gobierno busca cambiar la estrategia antinarcóticos restringiendo la aspersión aérea de cultivos ilícitos con el herbicida glifosato, promoviendo la sustitución voluntaria de los cultivos de los campesinos y limitando la erradicación forzosa en la que la fuerzas de seguridad intervienen.
Además, propuso a funcionarios del gobierno de Joe Biden hacer cambios en el acuerdo para la extradición de narcotraficantes, para que quienes negocien con el Estado colombiano beneficios jurídicos y dejen definitivamente su actividad delictiva no sean extraditados.
Murillo, el primer afrodescendiente en llegar al cargo de embajador en Estados Unidos, tendrá según Petro la tarea de configurar una nueva agenda bilateral con ese país que incluya como prioridad la lucha contra el cambio climático. Propuso una colaboración militar entre ambos países para combatir la deforestación en la selva amazónica y apagar los incendios que la dañen.
Fuente: AP