“Tenemos que saber que hay hipertensión, hay colesterol alto y por los estudios sabemos estadísticamente sin poesía que aumenta el riesgo en tanto por ciento del infarto y lo estamos viendo en consulta, y es culpa en parte de nosotros mismos los adultos. Hubo en consulta ve como le dice al paciente, hay comida chatarra, bueno sí pero eso es para mis hijos, los dulces son para los hijos, como si hubiese una etapa en la vida donde está permitido hacerlo todo al revés y todo mal porque el cuerpo aguantará, pero justamente estamos viendo que no aguanta y es tiempo de dar la vuelta”.
“Las porciones han crecido demasiado, si uno las compara con hace 50 o 60 años atrás, era inimaginable ver ahora, lo pequeño es grande y lo grande es inmenso y se ha adoptado eso como la nuevo normalidad, entonces todo el mundo consume así, todo el mundo se ve así y entra dentro de lo normal y estamos viendo que por primera vez lo hijos van a empezar, de seguir así, pues a ver una generación que empieza a enterrar padres porque están conociendo un normal que nunca fue tal”.
“La recomendación es regresar a los principios básicos, ha como era todo hace 15 segundos si tuviéramos 24 horas de historia. El humano se adaptó a la vida de la cacería, a las frutas en temporada, a la actividad física, al ayuno, a estar en contacto con lo que había. No había 24 horas al día vegetales con azúcar como son las frutas, estos líquidos envasados, no había todas estas cosas que se convierten no en la energía sino en la fatiga, que no son carbohidratos sino carbodrogas”.
“Cada vez el público está más educado sabiendo que lo que no tiene grasa en el cuerpo se convierte en grasa y que lo que tiene grasa en el cuerpo al contrario eleva el colesterol bueno como ocurre con la yema del huevo, alimentos que han sido dejados y que deberían volverse a usar, contrarios a los granos que engordan a los cerdos, a las harinas, a todos los cereales, a los jugos de caramelo líquido como le llamamos a estos jugos de fruta que por más natural que sean en alguien ya con barriga, con obesidad potencian el círculo vicioso de adicción, de hambre y engorde”.
“Afuera hay todo un mercadeo que está creando este círculo vicioso de adicción y animal, vegetal, huevo y semilla, pienso que así se puede regresar básicamente después de las once de la mañana si uno puede hacer su merienda con frutas de bajo contenido de azúcar, fresas, todos los berries en general y los frutos secos, en dos o tres días, cualquier muchacho que esté yendo a estos estudios se tiene que impresionar. La persona entiende que está mal pero no sabe cómo salir de este círculo. Reúnan en su despensa frutos secos, frutas de bajo índice glicémico, animales, vegetales, aguacates si les gustan y arranquen poco a poco, el desayuno con proteínas, pero a parti9r de las 10 de la mañana frutas, semillas, nueces, almendras, macadamias, avellanas, fresas, blackberries, blueberries, y todo lo que corra, que nade, que vuele y que se arrastre estará muy bien con vegetales. En dos, tres días ya el paciente estará sintiéndose deshinchado”.