El presidente Donald Trump no puede reasignar 89 millones de dólares de un proyecto militar de construcción en el estado de Washington para pagar el muro en la frontera con México, falló el jueves una jueza federal en Seattle.
La Corte Suprema federal y otras instancias judiciales han dicho que el gobierno puede comenzar a reasignar miles de millones de dólares de gasto militar al muro, y ya se han realizado labores en algunas secciones.
Pero la jueza de distrito Barbara Rothstein falló que la querella presentada por el fiscal general de Washington, Bob Ferguson, contiene argumentos diversos que no están cubiertos por esas decisiones.
Rothstein falló que reasignar los fondos es ilegal porque el Congreso _que tiene el poder sobre el dinero de conformidad con la Constitución_ específicamente negó a Trump más fondos para el muro. La decisión también fue ilegal debido a que tomaría dinero que el Congreso asignó para construcción militar y lo usaría para labores policiales internas, añadió la jueza.
“El Congreso rechazó reiterada y deliberadamente asignar todos los fondos que el presidente solicitó para un muro a lo largo de la frontera sur de Estados Unidos”, escribió Rothstein.
Si bien Trump ha insistido desde hace tiempo en que México pagaría por el muro, no ha sido así. A finales de 2018 y principios de 2019, el Congreso rechazó darle a Trump todo el dinero que quería para un muro fronterizo, lo que condujo a un cierre parcial del gobierno por 35 días. Los legisladores eventualmente le dieron 1.400 millones de dólares.
En respuesta, Trump declaró una emergencia nacional. El gobierno federal afirmó que eso le permitió desviar casi tres veces esa cantidad, 3.600 millones de dólares, de cuentas militares para construir 280 kilómetros (175 millas) de valla divisoria en California, Arizona, Texas y Nuevo México.
El año pasado, la Corte Suprema federal anuló una orden judicial que impedía al gobierno gastar 2.500 millones de dólares de los fondos del Departamento de Defensa designados a pensiones de militares y combate a las drogas. Pero las impugnaciones legales continúan en torno a ese dinero, así como sobre los 3.600 millones de dólares que el Pentágono está desviando de proyectos de construcción militares.
Los 89 millones de dólares de Washington estaban asignados para un muelle en la Base Kitsap de la Marina, al oeste de Seattle, donde tiene su puerto una flota de submarinos nucleares en el océano Pacífico.
El fiscal general de Washington dijo que perder ese dinero le costaría al estado 2,6 millones de dólares en ingresos fiscales en los próximos dos años, y que eso es suficiente para darle a Washington derecho a impugnar en la corte los planes del gobierno federal. La jueza estuvo de acuerdo.
“Este fallo es una victoria importante para el estado de derecho y el sistema de pesos y contrapesos que los padres fundadores consagraron en nuestra Constitución”, dijo Ferguson en un comunicado por escrito. “Esperamos que estos 89 millones de dólares sean utilizados de la manera prevista por el Congreso: para apoyar un proyecto de construcción militar en el estado de Washington”, agregó.
Fuente: AP