Funcionarios de inteligencia de Estados Unidos advirtieron a los legisladores que Rusia está interfiriendo en la elección de 2020 para tratar de ayudar al presidente Donald Trump a ganar la reelección, según tres funcionarios familiarizados con la sesión informativa a puerta cerrada.
La advertencia plantea dudas sobre la integridad de la campaña presidencial y si el gobierno de Trump está tomando las medidas adecuadas para combatir el tipo de interferencia que vio Estados Unidos en las elecciones presidenciales de 2016.
Los funcionarios pidieron el anonimato a cambio de hablar de información delicada. Dijeron el jueves que la sesión informativa de la semana pasada se centró en los esfuerzos de Rusia para influir en las elecciones de noviembre próximo y sembrar la discordia en el electorado estadounidense.
La advertencia hecha por los funcionarios de inteligencia fue reportada primero vez por los diarios The New York Times y The Washington Post.
Un alto funcionario del gobierno federal le dijo a The Associated Press que la noticia enfureció a Trump, quien se quejó de que los demócratas usarían la información en su contra.
En el transcurso de su presidencia, Trump ha restado importancia a las evaluaciones de la comunidad de inteligencia estadounidense sobre la interferencia electoral de Rusia en 2016, etiquetándolas de conspiración para socavar su victoria. El funcionario habló bajo condición de anonimato para describir la reunión privada.
La presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, tuiteó que «los votantes estadounidenses deberían decidir las elecciones estadounidenses, no Vladimir Putin». Agregó que todos los miembros del Congreso «deberían condenar los reportados intentos del presidente de desestimar las amenazas a la integridad de nuestra democracia y politizar nuestra comunidad de inteligencia».
La sesión informativa privada que ofrecieron funcionarios de inteligencia a legisladores de la Comisión de Inteligencia de la Cámara de Representantes sobre la interferencia rusa ocurrió el 13 de febrero. La revelación enfureció a Trump, quien un día después fustigó al entonces director de inteligencia nacional Joseph Maguire. Trump anunció esta semana que Maguire sería reemplazado por Richard Grenell, un firme aliado de Trump.
Varias agencias de inteligencia de Estados Unidos han dicho que Rusia interfirió en las elecciones de 2016 a través de campañas en redes sociales, y robando y distribuyendo correos electrónicos de cuentas demócratas. Han afirmado que Rusia intentaba impulsar la campaña de Trump y crear caos en el proceso político estadounidense.
El fiscal especial Robert Mueller concluyó que la interferencia rusa fue “extensa y sistemática”, pero él no encontró una conspiración ilícita entre Rusia y el equipo de campaña de Trump.
En la sesión de la cámara baja, los aliados de Trump desafiaron a la principal funcionaria electoral de la oficina del director de inteligencia nacional, Shelby Pierson, quien entregó las conclusiones, y dijeron que Trump ha sido duro con Rusia.
Si bien Trump ha impuesto severas sanciones económicas a Rusia, también se ha expresado amablemente del mandatario ruso Vladimir Putin y ha retirado tropas de áreas como Siria, donde Moscú podría llenar el vacío. El año pasado, demoró el apoyo militar a Ucrania _un adversario de Rusia_, una decisión que estuvo en el centro de su juicio político.
El Times indicó que Trump estaba molesto de que la sesión de la cámara baja se hiciera ante el presidente de la comisión, el representante Adam Schiff, quien dirigió los procedimientos del juicio político.
El jueves, Trump formalmente designó a Richard Grenell, embajador de Estados Unidos en Alemania y partidario leal, para reemplazar a Maguire como nuevo director interino de inteligencia nacional. Maguire está obligado a dejar el cargo pronto bajo una ley federal que rige los nombramientos interinos. El Times citó a dos funcionarios del gobierno que dijeron que el momento, tras la sesión informativa, fue una coincidencia.
Fuente: El Nuevo Herald