
Waves slam the Oceana Pier & Pier House Restaurant in Atlantic Beach, N.C., Thursday, Sept. 13, 2018 as Hurricane Florence approaches the area. (Travis Long /The News & Observer via AP)
Las inundaciones y crecidas de varios ríos en el sureste de Estados Unidos continuaron este lunes como consecuencia del paso de la depresión tropical «Florence», que dejó al menos 31 muertos, según confirmaron varios medios que citan a fuentes oficiales.
De los 31 fallecidos, 25 ocurrieron en Carolina del Norte y los otros seis en Carolina del Sur. Hay diversos ahogados, accidentes de tráfico o muertes por caídas de árboles sobre viviendas, circunstancia esta última en la que perdieron la vida dos niños en incidentes separados.
Cientos de miles de personas han tenido que ser evacuadas de sus hogares y unos 500.000 abonados siguen sin electricidad en la región afectada.
El presidente Donald Trump declaró este lunes el estado de emergencia en Carolina del Sur ante la devastación causada por Florence.
La declaración de emergencia, anunciada a primera hora de este lunes por la Casa Blanca, autoriza al Departamento de Seguridad Nacional (DHS) y a la Agencia Federal para la Gestión de Emergencias(FEMA) coordinar todos los esfuerzos de socorro en casos de desastre y destinar fondos federales para afrontar la tragedia.
La asistencia económica de la Administración, que se pondrá a disposición de diversas instituciones gubernamentales y civiles, servirá para implantar «medidas de protección de emergencia» en Carolina del Sur, que, junto con Carolina del Norte, están siendo los estados más afectados por el azote de la tormenta.
Los últimos datos del Centro Nacional de Huracanes (NHC, por sus siglas en inglés) divulgados este lunes indican que Florence se desplaza a una velocidad de 22 kilómetros por hora, con lo que se aleja así de las Carolinas tras descargar agua en esa zona todo el fin de semana.
«Es un desastre monumental para nuestro estado. Es una tormenta épica que todavía sigue porque los ríos están creciendo», dijo este lunes el gobernador de Carolina del Norte, Roy Cooper.
El Servicio Meteorológico Nacional también advirtió de «inundaciones históricas y catastróficas» en los próximas días a causa de la crecida de ríos. «En algunas áreas no se ha visto lo peor», alertó el gobernador.
La tierra «está saturada» por la cantidad de agua que ha caído desde el viernes, insistió Cooper al pedir a los ciudadanos no ponerse en peligro saliendo a enfrentar las inundaciones. «Solo unas pocas pulgadas de agua pueden arrastrar coches», dijo.
«Unas 2.600 personas han sido rescatadas así como 300 animales pero tenemos más por rescatar. Esta es una tormenta histórica, los ríos todavía están subiendo», declaró al confiar en que no «haya otra vida perdida».
Por su parte, el NHC indicó que «Florence» seguirá produciendo «fuertes lluvias sobre Carolina del Norte y Carolina del Sur y podría extenderse hacia Virginia, Pensilvania y Nueva York».
Asimismo, el Servicio Meteorológico Nacional (NWS) entregó un reporte preliminar sobre la cantidad de agua acumulada que ha caído en Carolina del Norte, en donde alcanzó en algunas zonas los 88 centímetros de altura.
Entre las ciudades más afectadas por las lluvias se encuentran Elizabethtown, Swansboro y Gurganos. Imágenes de medios locales muestran vecindarios rodeados de agua y decenas de carreteras en el mismo estado.
Fuente: Diario Las Americas / EFE