Tras varios meses de investigaciones, la fiscalía Estatal de Miami-Dade imputó al director de mantenimiento del Aeropuerto Internacional de Miami, Iván Valdés, por manipular las facturas de gastos por valor de 5 millones de dólares.
Según los documentos de la corte condal, Valdés, de 46 años de edad, se declaró “no culpable” de los cargos de soborno, manipulación de licitaciones, conducta inapropiada para un oficial y lavado de dinero que tendrá que enfrentar.
No obstante, según el fiscal federal Wifredo Ferrer, Valdés “confesó su participación y se entregó a las autoridades”.
Acorde al informe fiscal, Valdés manipuló el proceso de licitación, entre los años 2010 y 2015, para obtener el equipamiento necesario de luces para el aeropuerto al mejor precio posible, para luego inflar las facturas y quedarse con la recompensa de la diferencia.
“El pueblo, los contribuyentes, merecen que el dinero que duramente ganan y sufraga gastos del Gobierno, no vaya a parar a los bolsillos de individuos inescrupulosos”, señaló el fiscal Ferrer.
Luego recalcó que “corrupción corroe la confianza y que la fiscalía Federal, así como el Buró Federal de Investigaciones y la fiscalía Estatal continuarán trabajando para apresar a todos los funcionarios corruptos, independientemente de su posición.
“Es triste ver cómo un hombre que comenzó de jardinero en el aeropuerto y logró alcanzar el sueño americano, haya sido capaz de traicionar a su gente”, comentó la fiscal Estatal de Miami-Dade Katherine Fernández Rundle, durante un encuentro con la prensa, en el que presentó el resultado de la investigación conjunta con el FBI y la Policía de Miami-Dade.
Valdés operó con la ayuda de Roy Jesus Bustillo, 37, Rolando Pérez, 57, y José Barroso, 51. Además, Ygnacio Valdez, 45, también empleado del Departamento de Aviación de Miami-Dade, es acusado de encubrimiento de un delito grave.
El fotorreportero Álvaro Mata contribuyó con este reportaje.
Fuente: Diario las Américas