El presidente Barack Obama prometió el martes que actuará con rapidez una vez que reciba una recomendación del Departamento de Estado sobre la conveniencia de retirar a Cuba de la lista estadounidense de Estados que patrocinan el terrorismo, un obstáculo pendiente para el restablecimiento de las relaciones entre Washington y La Habana.
A pocos días de una cumbre hemisférica en Panamá, donde Obama se encontrará cara a cara con Raúl Castro, el mandatario demócrata no ofreció una señal clara sobre su tendencia o el plazo para su decisión.
Obama ordenó la revisión inmediatamente después de anunciar un avance diplomático con La Habana en diciembre.
Obama, en una entrevista a Reuters a principios de marzo, dijo que esperaba que Estados Unidos pudiera abrir una embajada en Cuba para el momento de la Cumbre de las Américas del 10 al 11 de abril, y funcionarios de su país ya habían dicho que la revisión estaba siendo acelerada.