JERUSALEN (AP) — El primer ministro israelí Benjamin Netanyahu ordenó el miércoles a sus ministros que interrumpan los contactos con sus correspondientes palestinos, dijo un funcionario, en un nuevo obstáculo para las conversaciones de paz mediadas por Estados Unidos.
La medida es represalia por la iniciativa palestina de solicitar su incorporación a agencias de las Naciones Unidas, que el funcionario dijo era violatorio del compromiso de los palestinos con las negociaciones. Los palestinos desestimaron la medida israelí aduciendo que las dos partes rara vez se reúnen, de todos modos.
Según los términos de las conversaciones de paz, Israel había prometido poner en libertad en cuatro grupos a 104 palestinos que mantiene presos desde hace mucho tiempo. A la vez, los palestinos dijeron que suspendían una campaña para incorporar a Palestina, reconocida por loa Asamblea General de la ONU como estado observador no miembro, a un total de hasta 63 agencias, tratados y convenciones de la ONU.
El presidente palestino Mahmud Abbas firmó cartas de incorporación a 15 convenciones internacionales después que Israel no cumplió la semana pasada con la liberación del cuarto grupo de prisioneros y renovó una iniciativa para construir viviendas en un asentamiento israelí en Jerusalén oriental, el área de la ciudad que reclaman los palestinos como futura capital. Israel después canceló la liberación de los presos.
Según la orden de Netanyahu, los ministros y sus directores no pueden reunirse con sus contrapartes palestinos, aunque continuarán los contactos a menor nivel, dijo el funcionario, que habló con la condición del anonimato por no estar autorizado a discutir el asunto públicamente. Agregó que la jefa del equipo negociador, Tzipi Livni, estaba exenta de la orden, lo que sugiere que el impacto sobre las conversaciones sería mínimo.
Los contactos de alto nivel entre israelíes y palestinos ya son poco frecuentes, dijo el vocero del gobierno palestino Ihab Bsaiso. «Esto no afectará nuestra vida diaria ni el manejo del gobierno», afirmó.
Bsaiso manifestó preocupación de que se vean afectadas las transferencias impositivas israelíes a los palestinos. Según los acuerdos interinos de paz, Israel recauda impuestos en nombre de los palestinos y transfiere los fondos cada mes. La suma exacta de la recaudación, aproximadamente 100 millones de dólares, es fijada en conversaciones entre altos funcionarios de finanzas.
Sin ese dinero, la Autoridad Palestina tendría dificultades para pagar los salarios de sus decenas de miles de empleados. El ministerio de finanzas israelí no respondió inmediatamente un pedido de comentarios sobre la situación.
Durante la última semana, Estados Unidos ha tratado de salvar las conversaciones de paz. El secretario de Estado norteamericano John Kerry, que ha encabezado el esfuerzo, pareció culpar a Israel el martes diciendo que se negó a liberar a los prisioneros tal como había prometido y siguió con los planes de construir nuevos asentamientos.
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