El pasado mes, la Organización Mundial de la Salud declaró el virus Zika como emergencia de salud pública. Desde entonces, se ha diagnosticado la presencia del virus en 153 personas en los Estados Unidos.
Con 42 casos diagnosticados desde enero, Florida encabeza el número de casos de Zika en la nación. Nueva York tiene la segunda cifra más alta de casos, con 23. Hasta ahora, la enfermedad ha sido solamente contraída por personas viajaron fuera del país a las zonas con epidemia.
Pero PETA, la organización protectora de los derechos de los animales, está advirtiendo a los residentes de la Florida de una vulnerabilidad única en el estado, específicamente en las instalaciones de monos del Condado Hendry, al oeste de Fort Myers.
De acuerdo con el diario Broward Palm Beach, en lugares como Primate Products Inc., ubicada en el Condado Hendry, los animales permanecen en jaulas al aire libre, rodeadas de pantanos y aguas estancadas, el caldo de cultivo ideal para el criadero de los mosquitos patas blancas o Aedes aegipty,que son los que transmiten la enfermedad.
Solamente los primates (incluidos los seres humanos y monos) pueden contraer Zika. Como consecuencia de la gran presencia de monos en condiciones vulnerables en la propiedad del Condado Hendry, PETA envió una carta a principios de este mes al Estado de Florida, afirmando que los residentes de la zona están en riesgo.
En un comunicado, PETA pide a los residentes de la Florida que se unan a la petición de cierre de estas «despreciables», instituciones, por considerar que «son tan peligrosos para la salud humana, como crueles con los monos».
Un representante de Primate Products Inc. aseguró al diario que las debidas precauciones son tomadas en cuenta en el lugar para evitar la propagación de cualquier infección. Aseguró que los monos son puestos en cuarentena cuando llegan y que los empleados cuentan con todas las medidas de protección. Alegaron además que los mosquitos pican sólo a los seres humanos, no a los monos, y que el mosquito que transmite el virus pueden volar sólo un cuarto de milla.
Pero PETA insiste en que la amenaza es real y ha iniciado una campaña en esa zona de la Florida, que consiste en publicar anuncios en medios de comunicación y condados, que ampliarán hasta Tallahassee, Fort Myers y Naples.
La enfermedad, transmitida por mosquitos infectados, provoca fiebre, dolor en las articulaciones, erupciones y enrojecimiento de los ojos. Rara vez es mortal, pero si se contrae durante el embarazo, puede dar lugar a una serie de deformidades infantiles, como microcefalia, en la que el cráneo del bebé se desarrolla de menor tamaño de lo normal.