Un día después de ser arrestado por practicar medicina sin licencia, el joven Malachi Love-Robinson quedó en libertad bajo fianza de $21.000 dólares.
El adolescente de Palm Beach fue acusado por hacerse con más de $3500 dólares por aplicar un tratamiento para el dolor de estómago a una señora de 86 años. También, es señalado de robarle tres cheques por los que cobró casi $2.800.
En conversación con la agencia The Associated Press, el joven dijo que estaba siendo acusado «falsamente». Luego, convocó a los medios locales a una rueda de prensa en la que se negó a responder preguntas y solo resaltó que sus abogados están trabajando para aclarar los cargos por los que se le acusa. Pidió a la comunidad «orar por él».
«Siento una profunda tristeza y me siento irrespetado por algunas de las cosas que han salido sobre el caso. «Mis abogados están trabajando duro, día y noche para asegurarse de que este problema se resuelva de la mejor manera posible», acotó.
De acuerdo con los informes del Sheriff del Condado de Palm Beach, un agente encubierto fue al consultorio de Love-Robinson en el New Life Medical Center, el martes. Allí, constató que el joven llevaba una bata blanca de laboratorio con un estetoscopio en su cuello.
El agente le dijo queestaba sufriendo de un dolor de garganta, letargo y estornudos. El hombre le tomó la temperatura, auscultó sus pulmones y corazón con un estetoscopio y le dijo que sufría de alergias. Le recetó un medicamento de venta libre.
En su declaración, el falso doctor dijo que estaba especializado medicina homeopática y aclaró que tenía un médico en el personal para prescribir antibióticos.
Los detectives también citaron el caso de Anita Morrison, quien presentó una denuncia alegando que Love Robinson había acudido a su casa cinco veces en diciembrd, después de que ella lo contactase en línea para tratar sus dolores de estómago.
Él le dijo que sufría de artritis y le vendió sus vitaminas, que costaron $ 3.494 cancelados con un cheque. En una de las visitas, la señora se enfermó más seriamente y Love Robinson llamó a una ambulancia para que la trasladaran a un hospital. Le recomendó que no llevara su bolso consigo, por lo que la señora se lo dejó y le pidió que lo guardara en su casa.
Después de abandonar el hospital, Morrinson se dio cuenta que su cuenta bancaria estaba en cero. Los detectives comprobaron que tres cheques habían sido cobrados por Love Robinson.