Los líderes de los países miembros de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA) manifestaron el miércoles su rechazo al despliegue de buques de guerra estadounidenses en las aguas del Caribe frente a Venezuela que la administración del presidente Donald Trump sostiene busca combatir las amenazas de los cárteles de drogas latinoamericanos.
En una declaración leída al término de una cumbre virtual del organismo regional, los gobernantes denunciaron lo que califican como un despliegue “disfrazado de operaciones antidrogas (que) representa una amenaza a la paz y a la estabilidad de la región y constituye una violación flagrante del derecho internacional y de la Carta de las Naciones Unidas que consagran el respeto a la soberanía».
Exigieron «el cese inmediato de cualquier amenaza o acción militar que vulnere la integridad territorial y la independencia política de los estados de América Latina y el Caribe”.
En la videoconferencia participaron los presidentes de Venezuela, Nicolás Maduro; de Cuba, Miguel Díaz-Canel; de Nicaragua, Daniel Ortega; de Bolivia, Luis Arce y el primer ministro Ralph Gonsalves de San Vicente y las Granadinas, entre otros representantes de los demás países miembros.
Maduro expresó que “estamos viviendo, como se sabe, una coyuntura de frenesí enloquecido, de amenazas a granel. Lanzan amenaza, por aquí, lanza otra amenaza por allá, los que se creen dueños del mundo».
A principios de agosto, el gobierno de Trump también anunció que duplicaría a 50 millones de dólares la recompensa por el arresto de Maduro, acusándolo de ser uno de los mayores narcotraficantes del mundo y de trabajar con cárteles para inundar a Estados Unidos con cocaína mezclada con fentanilo.
Arce expresó que su país rechaza «toda forma de injerencia. La verdadera seguridad de nuestros pueblos no se construye con la presencia de buques de guerra ni con el despliegue de tropas extranjeras, sino con más integración, más justicia social, más democracia y más soberanía”.
El organismo regional —creado en 2004 por los ahora fallecidos presidentes de Venezuela, Hugo Chávez, y de Cuba, Fidel Castro– nació como una iniciativa de integración ajena a Estados Unidos. Su objetivo de entonces era enfrentar las intenciones de Washington de formar un acuerdo de libre comercio continental.
Fuente: Associated Press