El director de Latam Advisors, Sebastián Marill, defendió la política arancelaria de Donald Trump como una estrategia necesaria para corregir años de relaciones comerciales asimétricas.
“Durante muchos años, nuestros socios comerciales se han beneficiado de nuestro mercado sin darnos lo mismo a cambio”, afirmó Marill.
Según el analista, los aranceles están logrando lo impensable: aumentar la recaudación, atraer inversiones históricas y fortalecer la industria local, todo mientras se mantiene la confianza del mercado.
El objetivo, explicó, es sustituir la producción extranjera por una industria nacional automatizada, con menos dependencia de la mano de obra barata. “Nos anestesiaron con baratijas chinas de mala calidad. Ahora el cambio empieza por casa”, sentenció.