Según el experto en inteligencia y seguridad internacional Joe Gehr, Lo que hemos visto en los últimos días entre las fuerzas armadas de Israel e Irán no es un conflicto reciente, forma parte de una larga historia de hostilidad por parte del régimen iraní desde la Revolución Islámica de 1979. .
Gehr, veterano de las Fuerzas de defensa israelíes explicó que Irán ha desarrollado durante décadas una estrategia de guerra indirecta mediante el financiamiento y control de grupos terroristas como Hezbollah en Líbano, Hamas y la Yihad Islámica en Gaza y Cisjordania, así como los hutíes en Yemen y milicias en Irak y Siria. Todo este “anillo de fuego” fue diseñado, según dijo, para cercar a Israel y hostigarla desde múltiples frentes.
Destacó también que Israel posee una capacidad tecnológica e inteligencia de primer nivel, al punto de haber logrado infiltrar territorio iraní, manipular drones ensamblados dentro de Irán, e incluso interceptar comunicaciones de altos mandos de Hezbollah. Sin embargo, más allá del uso de nuevas tecnologías de guerra, la preocupación más crítica para Israel hoy es la carrera nuclear iraní.
Según informes de inteligencia —citados por Gehr— Irán está a punto de alcanzar la capacidad para fabricar entre 9 y 15 bombas nucleares. Ante ese panorama, Israel decidió actuar de manera preventiva para evitar que el régimen más peligroso del mundo obtenga el armamento más destructivo del planeta.
Respecto a las conversaciones diplomáticas que se habían iniciado entre Irán y Estados Unidos, Gehr fue tajante: “Han sido años de negociaciones estériles. Irán es maestro del engaño estratégico. Juega ajedrez, mientras Occidente juega damas”. Añadió que, si bien existía una ventana de diálogo, ésta no arrojaba resultados concretos. El ataque israelí se lanzó justo después de que expirara un plazo de 60 días dado por Estados Unidos para que Irán desmantelara su programa nuclear, lo cual no ocurrió.
Consultado sobre el objetivo final de esta operación, Gehr afirmó que no se trata solo de eliminar instalaciones nucleares, sino también de destruir el sistema de misiles balísticos intercontinentales (ICBM) iraníes, que podrían alcanzar incluso territorio europeo o estadounidense.
Finalmente, sostuvo que esta no es solo una guerra por la supervivencia de Israel, sino una batalla que también protege al mundo occidental. “Irán no solo llama a destruir Israel. Llama al colapso del mundo judeocristiano y quiere imponer una tiranía basada en la sharia. Lo que está haciendo Israel es también por ustedes”, concluyó.