El coronel retirado de las Fuerzas Especiales, Ron MacCammon, afirmó que la estrategia de Washington busca asfixiar las rutas criminales del régimen de Nicolás Maduro con presión calibrada en el mar. Según él, los “tres golpes en el Caribe” demuestran que Washington considera al régimen como un “narcoestado”.
El militar retirado aseguró que los movimientos navales y la recompensa de 50 millones de dólares por la captura del dictador Maduro han generado terror dentro del régimen, que teme una extracción repentina o traiciones internas.
No obstante, MacCammon advirtió sobre los riesgos de una escalada accidental: “Un ataque equivocado, o un avión venezolano que se acerque demasiado a un buque estadounidense y provoque el lanzamiento de misiles, podría convertir en un minuto esta campaña de presión en una crisis de gran escala”.